IM MÉDICO #58 ANUARIO 2022

im MÉDICO | 58 [ ANUARIO 2022 ] 85 Total Infantil Renal 4.004 26 Hepático 317 14 Cardíaco 152 20 Pulmonar 193 4 Pancreático 76 0 Intestinal/MV 4 2 Total 4.746 66 PACIENTES EN LISTA DE ESPERA PARA TRASPLANTE* *A 31 de diciembre de 2022. Versus 31 de diciembre de 2021: 4.762 (66 niños) Fuente: ONT Impacto de la Covid-19 en el proceso del trasplante El programa de donación y trasplantes se vio dramáticamente afectado por el impacto de la pandemia de Covid-19, constituyendo todo un reto poder mantener la actividad que se venía realizando, algo que resultó casi imposible en el caso, por ejemplo, del trasplante de pulmón por ser el órgano diana de la infección causada por SARS-CoV-2. “Cuando llegó la Covid-19 a España, no teníamos ningún antecedente de cómo seguir el programa de donación y trasplante desde esta perspectiva, y no teníamos, en principio, conocimiento de cómo abordar la situación. De acuerdo con toda la evidencia disponible, comenzamos a dar los pasos que creíamos que podrían ser positivos para mantener un proceso que, de por sí, ya es muy complejo en circunstancias normales”, recuerda la directora de la ONT. En ello coincide el Dr. Royo-Villanova: “Se tuvo que trabajar mucho para preservar los programas y poder atender a los pacientes que más lo necesitaron en un contexto terrible como ha sido la pandemia”, que llegó a paralizar muchos programas, con cerca de un 25% de caída de actividad. Sin embargo, se pudo sacar provecho de tanta adversidad. Y es que, como cuenta el Dr. Sandiumenge, “hemos aprendido que el hecho de que el donante haya sufrido Covid-19 no impide que puedan utilizarse sus órganos, si cumple una serie de condiciones y recomendaciones guiadas por la evidencia científica y en colaboración con sociedades científicas. Bajo estas premisas se puede trasplantar órganos de personas que hayan sido infectadas”. Se ha hecho un seguimiento muy exhaustivo para garantizar que no hay riesgo de transmisión en relación a los órganos, explica al respecto María Rosario Pérez Beltrán. “A día de hoy, se están trasplantado órganos de pacientes positivos por Covid-19, excepto cuando se trata de trasplante pulmonar, ya que en estos órganos sí afecta de una manera muy singular. Sin embargo, se ha demostrado que otros como el riñón o el hígado se pueden implantar con toda seguridad”. Todo ello ha dado como resultado que, a finales de 2022, han sido trasplantados 180 pacientes a partir de 84 donantes con PCR positiva para SARS-CoV-2, tras una valoración individualizada y una adecuada selección de los receptores. injertos que, aunque funcionan, sus arterias pueden estar dañadas, o con más cúmulo de grasa en los órganos y eso puede repercutir, sobretodoalprincipio, enlafuncióndel injerto”, explicaelDr. Briceño. Las pérdidas de los órganos trasplantados pueden ocurrir, sobre todo, en el primer mes postrasplante debido, muchas veces, a problemas técnicos y otros posibles que arrastra el paciente desde antes del trasplante, bien porque están en diálisis, tienen problemas renales, opulmonares. Endefinitiva, sonenfermosmás delicados y el postrasplante puede ser más complejo. La supervivencia de un trasplantado a cinco años está alrededor del 50 al 60%, aunque también depende del tipo de órgano, ya que enel casodel hígado asciendehasta el 70%, además deotros factores como la edad del paciente. “Si cada vez nos atrevemos con pacientes más añosos, al final esto también va a condicionar. Así, en números globales a 10 años, uno de cada cuatro sigue vivo con una buena función del injerto. En el caso de los trasplantes de pulmón, tenemos pacientes que llevan trasplantados más de 28 años”, explica la Dra. Berastegui. Precisamente, segúnel Dr. Briceño,“alosclínicos loquemásnosestá preocupando, en estos momentos, es que, como los trasplantados cadavezvivenmásañosafortunadamente,vayansurgiendounaserie de problemas de salud sobre los que habrá que estar muy encima”. El retrasplante como opción selectiva Sin embargo, con el paso del tiempo el órgano trasplantado se va debilitando. De acuerdo con el Dr. Royo-Villanova, “en 15-20 años, el injerto implantado se va deteriorando y es probable que algunos pacientes requieran de un retrasplante, sobre todo, en función de la edadque tenga. Noes lomismoun trasplanteenunadulto jovenque en otromaduro.” Bajo una serie de condiciones y recomendaciones se puede trasplantar órganos de personas que hayan tenido Covid-19, excepto de pulmón

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