IM MÉDICO #60.2 ESPECIAL SALUD DIGITAL

im MÉDICO | 60.2 10 No es digital todo lo que reluce Desde las estrategias comunitarias y nacionales, los grandes enunciados y los lugares comunes, hasta que el paciente recibe un claro beneficio al ser atendido y ver gestionado su proceso de prevención o enfermedad, muchas veces existe un trecho importante. Por eso está ahí la Sociedad Española de Informática de la Salud (SEIS), para recordar que aún son grandes las carencias del sistema sanitario respecto a falta de profesionales, discontinuidad en los desarrollos a largo plazo ppr falta de financiación suficiente, la imprescindible ciberseguridad y un cambio de mentalidad que todavía es mucho más nominal que real en los circuitos asistenciales. Como informa esta sociedad científica, el presupuesto total para la digitalización de la sanidad pública en las comunidades autónomas apenas ascendió a 957.809 euros en 2022, es decir, sólo un 6,35% más que en el año anterior. Aunque los desarrollos digitales dentro del Sistema Nacional de Salud decayeron el -0,54% en su conjunto, respecto al año anterior, por lo que el índice de digitalización quedó suspendido en un reducido 1,35%. Aunque en esta contabilidad todavía no se pueden contemplar los fondos europeos transferidos desde la UE, pero no ejecutados. Ante esta atonía inversora que ya dura una década, se resiente la ciberseguridad y crece la preocupación porque no se dé la debida continuidad a esta supuesta época de alta inversión en este tipo de proyectos. En un contexto aparentemente definido como Espacio Europeo de Datos Sanitarios por las autoridades comunitarias. Tal como se expresó en Inforsalud 2023, como XXVI edición del evento, la estrategia de salud digital del SNS no tendrá éxito, si no da una respuesta armónica y proporcionada a todos los aspectos que representa la digitalización, y que son de índole tecnológicos, financieros y de competencia y número de profesionales, siempre desde la óptica deseable de la sostenibilidad. Lejos del derrotismo, esta cita tecnológica incidió en que existen grandes opciones para el sector de la salud gracias a desarrollos de machine learning y mediante un análisis masivo y bien dimensionado de los datos de salud que lleve a mejores diagnósticos, tratamientos y pronósticos en el tiempo. Barcelona, punto de referencia Tal como se informó en la última edición del Mobile World Congress, se espera que el mercado de la salud digital se eleve de los 159,3 billones de dólares registrados en 2020 a los 536,6 billones esperados para el año 2025, con lo que supondrá una expansión del 27,3% (CAGR). Para ratificar, entre otras cosas que únicamente la digitalización de atención es capaz de dar respuesta a la ingente demanda asistencial con garantías de calidad de vida, acceso a las prestaciones médicas con una paulatina corrección en costes. Dentro de una transformación de los modelos asistenciales que ya resulta imparable en las sociedades avanzadas. Traer futuro al presente El motor para una nueva Sanidad ha de venir de aprovechar todas las vías descritas para la innovación. Desde una posición de ventaja como puede haber sido vista la digitalización desde que llegó el último coronavirus conocido y el más dañino a escala global. Dentro del espacio que configura la UE para la información de salud, ya acotado como EEDS, la Administración trabaja para que en 2025 toda la población esté conectada a más de 100Mbps, para que el 80% de las personas, o más, sean competentes a escala básica, y para que el país cuente con 20.000 profesionales dedicados a la ciberseguridad, el Big Data y la IA, además de que la mitad de los servicios públicos se provean por conducto digital y que al menos una de cada cuatro empresas especializadas al fin en estas tecnologías. Gracias, además, a la potencia que permite la tecnología 5G, al ser la salud digital un ámbito con carácter dinamizador para otros sectores económicos. Y según los frutos que den en los próximos meses estrategias nacionales como la IA y la de medicina personalizada. Sin olvidar las ventajas que podría tener una agencia estatal de salud digital, tal como postula al SEIS. Ni tan poco que, actualmente, son startups y PYMES las principales entidades generadoras de aplicaciones de salud digital para las que los procedimientos de contratación pública raramente resultan amigables. + A favor de un centro estatal de Salud Digital A propuesta de la Sociedad Española de Informática de la Salud (SEIS) Funciones a implementar: • Hacer seguimiento de la estrategia de Salud Digital y contribuir a su implementación. • Dar soporte tecnológico y de servicios a los sistemas de salud y servicios sociales. • Establecer criterios, normas y requerimientos básicos a cumplir por los sistemas e infraestructuras, según exigencia de interoperabilidad. • Asentar bases de datos y tablas maestras para el SNS. • Elaborar propuestas de marco jurídico para intercambio e información e interoperabilidad. • Proponer las medidas, procedimientos e infraestructuras necesarias para la explotación de la información clínica con fines de: • Investigación • Evaluación del sistema de salud • Desarrollo, innovación y planificación • Gestión sanitaria • Mejora de la calidad asistencial • Impulsar y coordinar líneas de financiación específicas para la estrategia de salud digital. • Diseñar proyectos conjuntos entre servicios de salud y establecimientos sanitarios concertados para la optimización de recursos y compartición de proyectos. • Crear grupos sectoriales de trabajo específicos: industria, profesionales, administraciones e instituciones públicas, entidades privadas y colectivos de pacientes. • Fortalecer grupos de trabajo y consenso para fijar mejores prácticas en los procesos. • Proponer los indicadores a utilizar, evaluando y midiendo el progreso de la trasformación digital del sistema.

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