im MÉDICO | 60.2 60 Llull, explicó que un estudio del BBVA sobre actitudes a la ciencia concluye que un 42% de los españoles no cree que en la ética, ni que deba poner límites a la ciencia. Para ella los riesgos no se pueden eliminar, pero se pueden prever y evitar. Respecto al uso secundario de datos, la experta nombró que son los personales, clínicos y genómicos para diferentes fines a los que se persiguieron originalmente incluida la investigación, la atención médica y el desarrollo de políticas. Para Esquerda, garantizar la confidencialidad es complicado porque la totalidad de esta no va a existir. “En la casa de la bioética se entra por la puerta del consentimiento informado”. Distinguió entre el consentimiento específico y el amplio, siendo el primero el que cada uno consiente para un proyecto y hay que recontactar con las personas, el amplio se informa de la gobernanza. Existe también el dinámico, que es una forma de especifico, pero cuando vas actualizando datos mediante web u otros. “Las limitaciones del específico es que se van a perder muestras”, señaló. Manuel Medina, médico de Familia ICS, responsable del Sistema de Información de los Servicios de Atención Primaria (SISAP), se refirió a cómo convertir datos en información. “Hemos manejado millones de datos y a veces hemos obtenido información”. Según el doctor, la información es algo que se procesa y se puede interpretar. “La información no es sólo dar un número que signifique algo”. Hay cosas que ahora se miden que era impensable hacerlo antes. “Podemos medir las visitas, la accesibilidad, la longitudinalidad, los datos censales, y de múltiples fuentes como la maximización de competencias y la proactividad”. Mientras que Diego Hidalgo-Mazzei, psiquiatra del Hospital Clínic-IDIBAPS, dio a conocer Presto Clinic, un proyecto multidisciplinar que busca optimizar la atención de problemas de salud mental, integrando la ciencia de datos, tecnologías digitales móviles e Inteligencia Artificial. “Ofrece tratamientos psicológicos oportunos y personalizados, brinda atención oportuna a los problemas mentales, monitorización continua y detección de situaciones urgentes, y un mejor pronóstico, empoderamiento y calidad de vida”. En una fase 2 se establece el desarrollo de un chatbot piloto y evaluación de su factibilidad, el desarrollo colaborativo con pacientes de una app que integra chatbots, módulos psicológicos interactivos, monitorización de síntomas y personalización según valores personales. “Nuestros resultados son prometedores, pero sugieren la necesidad de adaptar y mejorar la solución basada en teléfonos inteligentes para mejorar el compromiso”, según el experto. Sobre el diseño persuasivo para la adopción de conductas saludables veró la ponencia de Manuel Armayones, director del Behavior Design Lab del eHealth Center de la UOC. “Trabajamos con el contexto en que se da la acción, la persona y la acción en sí misma”. Además el experto profundizó en algunas de las herramientas actuales como el chatGPT, que permiten soluciona problemas y “es importante saber cómo abordar tales nuevas realidades”. El experto perfiló que, una vez se sabe quién se quiere que haga qué, es cuando se centra en la persona, en su entorno, analizando las barreras y su eliminación para que la persona haga aquello que se desea. “Hay escalas de medir la persuasividad de una aplicación. Se genera un hábito que adoptamos y muchas veces son las empresas que usan nuestros datos que generan los hábitos de estas aplicaciones, y esto también sucede en la promoción de la salud”. Yasmina Okan, investigadora Ramón y Cajal, Departamento de Comunicación de la Universidad Pompeu Fabra, señaló que“el profesional sanitario y el paciente trabajan conjuntamente para llegar a una decisión consensuada, teniendo en cuenta el conocimiento científico existente, así como las preferencias y los valores personales del individuo”. En este marco, hay barreras como las limitaciones en la capacidad de procesamiento de información, sesgos cognitivos y afectivos, con el uso de los formatos que dificultan la comprensión. La experta se centró en algunas conclusiones e implicaciones éticas como que “contamos con evidencia sobre cómo mejorar los diseños para apoyar la toma de decisiones, pero no siempre se aplica”. Además cree que las aplicaciones móviles permiten la personalización de contenidos y formatos adaptados a los distintos usuarios. Asimismo, cree que se necesita más investigación sobre los aspectos donde la evidencia aún es limitada. Mientras que Adrián Dorado, co-fundador de Qualud, explicó algunos de los conceptos que enmarca la UX y la UI. “Parte de la conceptualización, la investigación, el diseño, UI, el desarrollo y el lanzamiento”. En la investigación del user experience, “valido las hipótesis, comprendo el problema, la patología y lo que la envuelve, y descubro quiénes son los principales actores”. Según el experto, las interfaces gráficas son importantes en el sector sanitario, pues “facilitan el uso, reducen la carga cognitiva y el tiempo de uso, y aumentan la mejora de la experiencia. La accesibilidad es una ventaja competitiva”. “Y las experiencias son aquellas cosas que nos llevamos de la vida”. +
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