IM MÉDICO #60

im MÉDICO | 60 87 como protagonista- cambiarán completamente el paradigma de la gestión tal y como la conocemos. A eso hizo referencia el presidente de SEDISA, José Soto Bonel, durante la clausura de este evento en la que se conoció que Zaragoza será la próxima sede en 2025. Anunció que, por fin, se materializará el tan luchado Grado en gestión sanitaria al haber encontrado universidad, posibilitando “el relevo directivo” al que aspiran los gestores sanitarios. Influenciados por la ubicación de la cita, una notable presencia de profesionales canarios acudieron hasta la capital de la isla de Gran Canaria. Solo los representantes locales presentaron más de sesenta comunicaciones, además de mostrar una participación destacada de los profesionales del Servicio Canario de la Salud y del Comité Local de la organización del Congreso. A nivel nacional, la organización subrayó la multiplicidad de orígenes de los trabajos presentados: hubo de todas las comunidades autónomas (CCAA), incluidas Ceuta y Melilla. Además, las entidades organizadoras del Congreso Nacional de Hospitales y Gestión Sanitaria nombraron a sus nuevos Socios de Honor en la clausura de la 23 edición. Así, fueron distinguidos con este reconocimiento por parte de SEDISA Candela Calle Rodríguez, Anna Rodríguez Cala y Juan Antonio Marqués Espí, mientras que ANDE los otorgó a José Moguer y Adelaida Zabalegui. Por último, en el apartado de reconocimientos, recibieron el Premio a la Excelencia en la Gestión Sanitaria tanto Soto como el presidente de la Asociación Nacional de Directivos de Enfermería (ANDE), Jesús Sanz Villorejo. El reto de profesionalizar La profunda transformación que vive el Sistema Nacional de Salud (SNS) se aprecia en problemas que afectan de lleno a los gestores, como capear la carencia de profesionales que vendrá y que podría ascender hasta a 9.000 profesionales sanitarios, según se arrojó durante el transcurso de las tres jornadas que celebró el congreso. En algunas de ellas, la falta para cubrir vacantes ya se pone muy de manifiesto, como es el caso de los radiólogos. “Falta cantera”, reafirmó Miguel López Valverde Argueso, director General Sistemas de Información y Salud Digital de la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid, que apuntó hacia la necesidad de encontrar, entre otros, bioinformáticos, genetistas y profesionales del ámbito tecnológico. No solo es que no haya manera de cubrir los nuevos puestos que demanda la transformación digital, sino que incluso cuesta retener a los propios profesionales sanitarios: “La gente se nos va”, lamentó César Pascual Fernández, coordinador de Proyectos de la Fundación SEDISA, quien tampoco dudó en señalar a la politización como gran parte culpable de esta falta de recambios en los puestos directivos. Además, evidenció cómo estos siguen “muy alejados” del resto de compañeros de otros sectores y, cómo en las últimas décadas, apenas ha habido una mejora en lo referido a las condiciones para la alta dirección. Es por eso que un “número nada desdeñable de directivos han perdido la ilusión, las ganas de hacer las cosas. Eso los lleva a la resignación”, relató Pascual. “Es el primer paso de la claudicación, y si los directivos claudican, el sistema no va a poder seguir avanzando”. Una de las razones que alejan el interés de futuros candidatos es el punto señalado por Pascual: dicho peso político sobre los cargos justifica la reclamación que hizo Candela Calle Rodríguez, directora General Fundación Sant Francesc D’Assís y vocal de la Junta Directiva de SEDISA, fue tajante: “En este momento, más que nunca, necesitamos de líderes fuertes, valientes, que sean capaces de escuchar lo que está pasando en nuestro mundo”. “En estos momentos, la gestión sanitaria no es atractiva”, reconoció Julio Miguel Fuster Culebras, médico de Familia, Gerència Atenció Primària de Mallorca. La solución sería “fácil”, en su opinión, formalizando “contratos de alta dirección acorde al mercado”,

RkJQdWJsaXNoZXIy NTI5ODA=