IM MÉDICO #63

37 Nos preocupa nuestra visión. La Oftalmología se dedica a conservar, restablecer, rehabilitar y promocionar la salud del órgano de la visión y de las estructuras con él relacionadas en el contexto general del ser humano y en su relación con el medio. Segmento anterior y posterior, glaucoma, neuroftalmología, oftalmología infantil, oculoplástica y órbita son distintas áreas de esta especialidad. Es una especialidad muy tecnológica. Cada vez cuenta con aparatos más sofisticados, tanto de diagnóstico como de tratamiento. En la parte de diagnóstico, uno de los hitos más importantes fue la introducción de la tomografía de coherencia óptica (OCT, por sus siglas en inglés). No utiliza un método radiológico, sino que es un método óptico, pues hace unas secciones micrométricas de las diferentes partes del ojo y tiene una resolución que es casi anatómica. Por su parte, la Inteligencia Artificial (IA) se está empleando para ayudar a los oftalmólogos a diagnosticar enfermedades oculares y planificar el tratamiento, mientras que la realidad virtual se utiliza cada vez más en la formación de los profesionales. Respecto a la cirugía, hay avances continuamente. En la de cataratas, aunque la técnica de elección continúa siendo la facoemulsificación, la extracción con ultrasonidos, cada vez se están introduciendo más métodos de láser que ayudan a realizar parte de la cirugía de cataratas de una forma más precisa, aunque no se pueda realizar hoy por hoy toda la cirugía de cataratas con láser. Hay determinados procedimientos, como las incisiones corneales, la incisión en la cápsula anterior del cristalino, la fragmentación del núcleo, que pueden efectuarse con láser. El diagnóstico es que la Oftalmología en España goza de buena salud. En ese sentido, el oftalmólogo Jorge Alió, el único médico español presente en el ranking The Ophthalmologist Power List 2023, señala que asistimos a un escenario de país “con una Oftalmología pujante, donde hay un elenco de profesionales con un buen nivel de formación y un reconocimiento internacional”. En lo que hay recorrido de mejora es en el apartado de la investigación. A su parecer, hay “una notable falta de estímulo investigador”. Lamenta que “somos uno de los países europeos donde se realizan más cirugías de catarata, pero no contamos con tecnología propia de nada”. Tenemos muy buenos cirujanos, lo que genera confianza. Francisco José Muñoz Negrete, jefe de Servicio de Oftalmología del Hospital Universitario Ramón y Cajal, señaló, en entrevista con IM Médico, que se está trabajando en la terapia génica de enfermedades hereditarias de la retina o del nervio óptico. Concienciar, ante todo Otro punto de mejora es la concienciación. La Sociedad Española de Oftalmología (SEO) avisa de que hay “una proporción significativa de enfermedad ocular infradiagnosticada en la población española”. Esto se comprobó cuando los diputados y trabajadores del Congreso de los Diputados participaron del 14 al 16 del pasado mes de marzo en un programa de cribado de edema macular diabético (EMD), glaucoma y degeneración macular asociada a la edad (DMAE) con motivo de la celebración de ‘Semana de la prevención de la ceguera irreversible’, organizada por la SEO con el patrocinio de AbbVie y la colaboración de Topcon. Dicha evaluación incluía anamnesis, agudeza visual, presión intraocular, refracción, paquimetría, exploración en lámpara de hendidura, retinografía y tomografía de coherencia óptica macular y de nervio óptico. Los resultados de este cribado acaban de ser publicados en la reconocida revista Archivos de la SEO con resultados sorprendentes. Durante tres días se exploraron 205 pacientes, 109 mujeres (53,2%) y 96 varones (46,8%) con edad media de 49,4 años (rango 23 a 71). Durante la exploración, las afecciones más frecuentemente diagnosticadas fueron: glaucoma, hipertensión ocular o síndrome de dispersión pigmentaria (13; 6,3%), defecto refractivo (11; 5,4%) y enfermedad de la superficie ocular (6; 2,9%). De los 19 diagnosticados de glaucoma, hipertensión ocular o síndrome de dispersión pigmentaria, 13 fueron diagnósticos incidentales (68,4%). De los seis que presentaron maculopatía, cuatro fueron de novo (66,7%). Y de los ocho con distrofias o degeneraciones corneales, cinco fueron de novo (62,5%). Es decir, el paciente desconocía el diagnóstico antes de la exploración.

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