IM MÉDICO HOSPITALARIO #7 - page 81

im
MÉDICO HOSPITALARIO
| 07
81
Auge de la tecnología
Tal y como nos explica Joaquín Estévez, al ser pregunta-
do por los wearables,
“según un estudio realizado por ABI
Research, el 60 % de estos dispositivos que se vendieron el año
pasado pertenecía a la categoría de fitness o salud, facilitando
el envío de datos e interacción con los profesionales sanitarios.
A este respecto, pueden educar a las personas para que tengan
mayor conciencia y control de su salud, y mejora y facilita el
seguimiento del paciente crónico por parte del médico”.
Las aplicaciones móviles, las redes sociales y las nuevas tec-
nologías representan una verdadera revolución. En concreto,
se han mostrado en el ámbito sanitario como una herra-
mienta con grandes posibilidades para facilitar y hacer más
eficiente la interrelación entre pacientes y profesionales. “
De
hecho, el potencial de las aplicaciones móviles es casi infinito”
,
afirma el gerente.
A respecto de la coordinación de los agentes que intervienen en
la sanidadpara incorporar innovaciones tecnológicas, opina que
“todos persiguen tradicionalmente el mismo objetivo, la salud del
paciente, y están igualmente comprometidos con la sostenibilidad
del sistema sanitario. Si la innovación respondeaestos dos paráme-
tros, las decisiones sobre incorporación siempre son más sencillas.
No hay que olvidar, que la eficiencia, la eficacia y los resultados en
salud, ademásde laevaluación, hande fundamentar las inversiones
responsables ensalud. Lasostenibilidaddel sistemadependedepo-
der desinvertir en lo innecesarioparapoder hacerlo en lo realmente
innovador que aporta valor añadido en salud”.
Innovación
Sonmuchas las voces quehablandeeSalud, aplicacionesmóviles
destinadas a la salud y, en general, la incorporación de las TIC a
todos los eslabones del proceso sanitario. A respecto, el gerente
reflexiona que
“no hay que tener miedo a la incorporación de la
tecnología en la gestión, pero tampoco es mejor que lo actual sólo
por ser nueva. Volvemos a laclave, laevaluación independiente yde
calidad. En España se está trabajandomucho en eSalud y es funda-
mental darle visibilidad. Nuestro país ha destacado en las últimas
décadas por disponer de uno de los mejores sistemas sanitarios
del mundo, y a ello ha contribuido la excelente calidad de nuestros
profesionales y la innovación que en este campo han aportado las
TIC. De hecho, España ha sido pionera en innumerables iniciativas
de éxito y, como la radiología digital, la historia clínica electrónica
o la prescripción electrónica. Sin embargo, hoy en día es necesario
hacer unamayor inversión en tecnologías, y estandarizar su imple-
mentación a través de proyectos innovadores, con el objetivo de
mantener esta posición de liderazgo”.
Estéveznodudaenafirmar que laaplicaciónde lasTICa la sanidad
ayuda de forma notable a mejorar los resultados en salud de la
población, además de mejorar la eficiencia del sistema y reducir
el consumo de recursos sanitarios y costes.
“Podemos decir que
la aplicación de las TIC es una de las principales palancas a poner
enmarchade caraagarantizar la sostenibilidaddel sistema sinque
ello implique unamenor calidad”.
En cuanto a la dirección adecuada a seguir, buscando la sanidad
del siglo XXI, Estévez opina que
“debemos hacer evolucionar el
sistema, rediseñando la Atención Primaria, y huir del hospitalocen-
trismo,procurandolaintegracióndelosserviciossanitariosysociales
y trabajando en red, para dar respuesta a la cronicidad. Los centros
hospitalarios en general están enfocados a pacientes agudos, y
debenevolucionar hacia laatencióna lacronicidad. Encuantoal di-
señoarquitectónico, debeorientarsea laconfortabilidadyagenerar
impactospositivosapacientesy familiares, contribuyendoaatenuar
la tensión propia del proceso asistencial: centros más horizontales,
con más cristal y menos cemento, etcétera. Además de cuidar al
paciente, los centros deben aportar eficiencia energética, con un
uso responsable de las energías, y sostenibilidadmedioambiental”.
Profesionalidad
Desde SEDISA defienden que los directivos de la salud tienen la
responsabilidad y el reto de hacer de motor de cambio y liderar
la evolución del modelo sanitario, aportando equidad frente
a la variabilidad, calidad frente a las deficiencias asistenciales,
resultados frente a la inercia de la gestión y sostenibilidad frente
a las bolsas de ineficiencia.
“Nos enfrentamos, en esta línea, a un
reto cadadía: aprovecharmejor los recursos, que son limitados, con
el fin de dar una atención sanitaria de calidad y, al mismo tiempo,
aportar eficiencia al sistema y colaborar con la sostenibilidad. Para
ello, es fundamental que el gestor sanitario y el directivo de la salud
tengan una formación especializada y una experiencia”.
Sin embargo, según el Informe Profesionalización de los Directi-
vos de la Salud, realizado por SEDISA, siete de cada 10 directivos
de la salud cree que la selección del directivo sanitario depende
de suafinidadpolítica enmayormedidaquede suexperiencia en
gestión, gerencial y/ oclínica, y soloel 53%afirmahaber dedicado
tiempo a la formaciónenhabilidades directivas durante el último
año (siendo entre 0 y el 15% el tiempo dedicado a formación
a lo largo de un año) y más del 44% hace más de cinco años
que no se ha formado en esta área. Al respecto, Estévez afirma
rotundo que
“la efectividad de
la gestión exige que el directivo
sea un profesional al que se le
plantee un programa de gestión
y unos objetivos concretos, ba-
sado en el bien social y en unas
normas claras gestión sanitaria
que puedan ser evaluables. Solo
así, con formación y autonomía,
elgestorpuedegestionarynosolo
administrar”.
:
“La sostenibilidad del sistema
depende de poder desinvertir en
lo innecesario para poder hacerlo
en lo realmente innovador, que
aporta valor añadido en salud”
1...,71,72,73,74,75,76,77,78,79,80 82,83,84,85,86,87,88,89,90,91,...92
Powered by FlippingBook